Uno de los entornos hogareños que más inspira y enamora es indudablemente el estilo nórdico. La razón principal de ello es que el diseño de vivienda nórdico o escandinavo transmite calidez, sencillez, orden y equilibrio con la naturaleza. También destaca su estilo minimalista, el cual ha inspirado a otros entornos hogareños.
Es importante mencionar que este estilo decorativo surgió dado que en los países nórdicos (Suecia, Noruega, Dinamarca, Finlandia e Islandia) el clima por lo general es frío, además de que los inviernos son largos y sus días son más cortos. Por ende, los escandinavos adoptaron este estilo hogareño con el fin de dar una respuesta a dicha situación. Toda la decoración nórdica tiene una función, por lo que si queremos reformar nuestras casas para adoptar dicho estilo vamos a requerir de ciertos materiales y estilos ambientales.
Colores claros y luminosos
La primera característica que debemos tener muy en cuenta a la hora de adoptar el estilo hogareño nórdico es el color y la iluminación. No cualquier color nos dará esa sensación de ambiente escandinavo, pues tal como señala el experto en decoración, Jordi Montero, director de Montero Construccions, mientras más claros sean los colores mejor será la adaptación nórdica. Esto se debe fundamentalmente a que el estilo escandinavo busca conseguir la mayor iluminación posible.
Por ende, los colores oscuros quedan terminantemente prohibidos. Sin embargo, esto no significa que podamos incluir pequeños objetos decorativos de tonos oscuros. En cuanto a la luminosidad, se trata de otro factor clave, por lo que sería muy recomendable agrandar las ventanas a fin de dejar entrar la mayor cantidad de luz solar posible.
El uso de la madera
Otro material muy importante si queremos conseguir un estilo nórdico en nuestro hogar es usar la madera. Esta no solo debe estar presente en el suelo, paredes, techo, mesas, sillas y muebles, sino también en muchos de los implementos y accesorios que utilicemos. Obviamente, la tonalidad de la madera debe ser clara, como por ejemplo, el haya, el abedul, el arce, roble, pino, etc.
Esto hará que la casa capte más iluminación y por ende, se tornará más acogedor y envolvente. En caso de que no deseamos poner pisos o paredes de madera, una alternativa pueden ser las cerámicas o revestimientos que imitan la madera.
La naturaleza dentro del hogar
Otro aspecto principal del estilo nórdico son los elementos de naturaleza, principalmente plantas. Por ello, nunca deberías obviar tener varios ramos verdes con flores en diferentes sitios del hogar. También es válido tener plantas de otras latitudes lejanas de los países nórdicos como cactus.
Tener plantas en un hogar de estilo nórdico, además de hacer reverencia a los ciervos, se dará mayor calidez a los espacios y aportarán mucho colorido. Otro detalle que no debería faltar son los complementos hechos a mano como mantas, colchas, y cestas, tejidos con materiales de tipo: lana, cuero, algodón, lino, mimbre, etc.
No sobrecargar el mobiliario
Como se indicó al inicio del artículo, el hogar nórdico se caracteriza por ser totalmente funcional, es decir, tener lo que en realidad es necesario y evitar muebles innecesarios que rompan el equilibrio y espacio del hogar. Por ello, los muebles de estilo escandinavo se caracterizan por ser sencillos, de líneas depuradas, con ligeras curvaturas y muy orgánicas.
Es importante reseñar que los nórdicos prefieren lo práctico a lo estético, por lo que mientras menos pieza haya quitando espacio al hogar, será mucho mejor. El minimalismo es un aspecto clave en el diseño nórdico.
Estampados claros y geométricos
Para decorar los muebles y cojines, así como en el uso de alfombras, se pueden usar estampados claros que representen figuras geométricas como rombos y rectángulos. También se pueden adornar las paredes con cuadros familiares y elementos alusivos al medioambiente: montañas, plantas, animales, ríos, etc. Estos deben ser de colores planos y sin mucha perspectiva.
En cuanto al salón, se puede utilizar una decoración de papel, ya sea de naturaleza o de figuras geométricas en ciertos lugares.
Combinar con otros estilos
El diseño nórdico se puede combinar con otros estilos, siempre y cuando se sepa elegir los materiales y elementos más adecuados para ello. Si deseamos agregar nuestro “toque personal” al estilo nórdico, podemos adoptar ciertos elementos del estilo vintage e industrial, siempre y cuando no sobrecarguemos el entorno.
Por ejemplo, podemos combinar paredes con ladrillos BRICS, realizar divisiones empleando hierro o cristales, usar elementos decorativos antiguos o cuadros con colores puros de diferentes temáticas al ambiente o familia. Esto nos permitirá crear un entorno hogareño mucho más personal y vívido.
Adoptando el estilo “Hygge”
La filosofía “Hygge” proviene de Dinamarca y Noruega y engloba todo lo que suele ser acogedor, íntimo, de convivencia y satisfacción de un hogar. Por ello, un hogar que pretende adoptar el verdadero estilo nórdico tiene que buscar transmitir dicha filosofía. Es por esto que los hogares nórdicos siempre incluyen elementos como velas, infusiones, mantas calientes, etc. Para dar esa sensación de confortabilidad.