Este es mi primer post del blog, me estreno como Blogger!!! y no sabéis lo ilusionada y emocionada que estoy con este nuevo proyecto.
La primera vez es complicado enfrentarte a una pantalla casi en blanco, tú y tu ordenador, muchas ideas en la cabeza, pero difícil de plasmar y elegir la adecuada.
Muchos os preguntaréis el por qué de este blog, su nombre, su contenido…Pues bien, quiero transmitir en él toda mi pasión por el estilo escandinavo. Os voy a mostrar ideas de decoración, interiorismo, los mejores hoteles con dicho estilo, espacios comerciales, decoración para eventos, fotografías, diseño gráfico… y todo ello bajo las características que definen al estilo; de líneas depuradas, sencillo, natural, práctico y a la vez bello… así es todo lo que os iréis encontrando.
Para introduciros un poquito más en el tema, os voy a hablar de los orígenes de este estilo:
El Estilo Escandinavo, también conocido como Nórdico, es propio de Suecia, Noruega, Dinamarca y Finlandia. Nació a principios del siglo XX y todavía hoy se mantiene, con algunas variantes.
En él predominan los colores neutros que nos encontramos en sus paisajes. Todo está influenciado por el clima y la situación geográfica de estos países. Es por ello que se intenta transmitir esa calidez y luminosidad que en muchas ocasiones contrarrestan a su clima. Son zonas con escasa luz natural y fríos y largos inviernos, esto hace que se tienda a jugar con espacios interiores amplios y muy luminosos, con grandes ventanales, sin persianas y con cortinas de telas muy finas y ligeras, dejando paso así a la luz natural.
Cómo color predominante encontramos el blanco, para dotar a los espacios de mayor luminosidad, siempre acompañado con elementos de colores vibrantes como el rojo, azul, verde… que hacen destacar del resto de la decoración.
A la hora de elegir materiales y texturas, predominan los que provienen de la naturaleza, como el algodón, el lino, la madera…, ésta última empleada mucho para los suelos, siempre en tonos claros y neutros para ayudar a conseguir espacios luminosos y amplios.
Los muebles son de líneas muy depuradas, suaves, con zonas de curvas muy sinuosas, de aspecto acogedor.
Y por último, para los elementos decorativos encontraremos piezas huyendo de lo exuberante, buscando la sencillez, realizadas principalmente en vidrio y cerámica.
Ante ello, la funcionalidad es algo que está por encima de todo.