Hace mucho que no le dedicaba una entrada a un elemento de la vivienda que, para mi, es todo un arte, las escaleras. Hoy nos centramos en las escaleras de caracol, mis preferidas de toda la vida. Desde bien pequeña tengo obsesión por este tipo de escaleras, cuando iba a casa de alguna amiga o familiar y veía este tipo de escaleras, me parecían de lo más divertido, sólo quería subir y bajar por ellas, eran como una atracción, jeje.
Hoy me siguen pareciendo igual de atractivas y además son perfectas para espacios reducidos. Si estáis pensando en cambiar vuestra escalera, podéis buscar y poneros en contacto con empresas de reformas de escaleras para que os indiquen cual sería la mejor solución para vuestro espacio, según necesidades y gustos. Hay que pensar muy bien cómo encajar la escalera en una vivienda y mejor hacerlo de la mano de profesionales, de especialistas en este sector. Son escaleras de gran peso visual y serán las protagonistas de la estancia, así que debe estar muy estudiadas sus características.
Las escaleras de caracol son muy empleadas en lofts, ya que ocupando una mínima superficie, podemos conectar dos plantas y estancias de la casa, así como para conectar espacios a doble altura.
Existen muchos modelos diferentes, con distintos materiales y acabados. En el estilo nórdico–escandinavo no hay ninguna preferencia en cuanto a sus características, pero sí predominan las de acero en blanco. Es en este estilo dónde más se ven este tipo de escaleras, los nórdicos hacen más uso de las escaleras de caracol. Las blancas se integran perfectamente en la decoración nórdico-escandinava, ya que es éste color el que predomina en dicho estilo. Darán sensación de elegancia, sencillez y ligereza a las estancias, pero siempre siendo la protagonista.
Para los más atrevidos y si queréis darle gran protagonismo a la escalera, como si de una obra de arte se tratase, elegir una escalera de colores llamativos, que destaque sobre el resto de la decoración. ¿Os atrevéis con un amarillo?
Las de acero o metálicas son perfectas para dar un toque industrial a una vivienda, y si las dejamos sin pintar todavía más. Con ellas dotarás a la estancia de gran carácter y fuerza.
Como veis, las hay para todos los gustos y necesidades y son aptas para cualquier estancia de la casa; en mitad de un salón, en una cocina, en el pasillo, para conectar exteriores…. Se coloque donde se coloque, siempre será la gran protagonista, la obra de arte estrella de la estancia.
¿Qué os parecen este tipo de escaleras?
¡Buen miércoles!
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